River tenía que estrenarse en la nueva Liga Argentina contra Central Córdoba y en el Monumental. Después del empate ante Nacional por la Libertadores, Demichelis metía cambios y los más significativos fueron los reemplazos de los laterales: Sant´Anna por Herrera y Casco por Enzo Díaz. Y a River le resultó, porque ambos fueron importantes en el armado de los ataques. De entrada se lo anularon a Colidio, pero el delantero iba a ser protagonista de ese primer tiempo. Porque Solari metio un centro cruzado, Casco se la sirvió al mencionado Colidio y 1 a 0. El visitante no es rival de primera A, claramente se la va a hacer difícil sostener la categoría. Y encima promediando esa mitad, se queda con 10 por falta sobre Echeverri. A River se le hizo aún más fácil y otra vez Colidio se anotaba en el marcador con cabezazo, luego de un buen centro de Nacho Fernández.
En ese primer tiempo la tuvieron Barco y Echeverri, pero el arquero era la figura de lo poquito que mostraba Central Córdoba. El segundo período casi que estuvo de más, River manejó a gusto la pelota, hizo todos los cambios que pedía el partido y solo quedo tiempo para que Barco se sacará la rabia clavando un golazo desde 35 metros. Festejo con bronca y algún grito a la tribuna, que claramente deberá corregir si quiere seguir con su estadía en River.
Ganó River y no mucho más, quedará sólo el 3 a 0, los silbidos que volvieron para Demichelis y el tonto festejo de Barco. River es muy grande para algunos, y piensan que el cariño de la gente se logra de la noche a la mañana. Esto es River.